viernes, 9 de noviembre de 2012

ATM



Trastornos de la articulación temporomandibular

Los trastornos de los músculos y la articulación temporomandibular (trastornos de la ATM) son problemas o síntomas de las articulaciones y músculos de la masticación que conectan la mandíbula inferior al cráneo.
Ver también: dolor facial

Causas

Existen dos articulaciones temporomandibulares apareadas, una a cada lado de la cabeza, localizadas justo al frente de los oídos. La abreviación "ATM" literalmente se refiere a la articulación, pero con frecuencia se utiliza para referirse a cualquier trastorno o síntoma de esta región.
Muchos síntomas relacionados con la ATM son causados por efectos del estrés físico y emocional sobre las estructuras alrededor de la articulación. Estas estructuras abarcan:
  • Disco cartilaginoso en la articulación
  • Músculos de la mandíbula, la cara y el cuello
  • Ligamentos, vasos sanguíneos y nervios cercanos
  • Dientes
Para muchas personas con trastornos de la articulación temporomandibular, la causa se desconoce. Algunas causas dadas para esta afección no se han comprobado bien y entre ellas están:
  • Una mala mordida o dispositivos ortodóncicos.
  • El estrés y el rechinamiento de los dientes. Muchas personas con problemas de la ATM no rechinan sus dientes y muchos que han estado rechinando sus dientes durante mucho tiempo no tienen problemas con su articulación temporomandibular. Para algunas personas, el estrés asociado con este trastorno puede ser causado por el dolor en vez de ser la causa del problema.
La mala postura puede también ser un factor importante en la ATM. Por ejemplo, mantener la cabeza hacia adelante todo el día mientras se está mirando una computadora tensiona los músculos de la cara y el cuello.
Otros factores que podrían empeorar los síntomas de la ATM son el estrés, una dieta deficiente y la falta de sueño.
Muchas personas terminan teniendo "puntos desencadenantes": contracción muscular en la mandíbula, la cabeza y el cuello. Estos puntos desencadenantes pueden remitir el dolor a otras áreas causando dolor de cabeza, de oído o de dientes.
Otras posibles causas de síntomas relacionados con la ATM son, entre otras: artritis, fracturas, dislocaciones y problemas estructurales presentes al nacer.

Síntomas

Los síntomas asociados con los trastornos de la articulación temporomandibular pueden ser:
  • Dificultad o molestia al morder o masticar
  • Chasquido o chirrido al abrir o cerrar la boca
  • Dolor facial sordo en la cara
  • Dolor de oído
  • Dolor de cabeza
  • Dolor o sensibilidad en la mandíbula
  • Bloqueo de la mandíbula
  • Dificultad para abrir o cerrar la boca

Pruebas y exámenes

Posiblemente sea necesario ver a más de un especialista para el dolor y los síntomas de la ATM, como el médico de cabecera, un odontólogo o un otorrinolaringólogo, dependiendo de los síntomas.
Un examen completo puede involucrar:
  • Una evaluación dental que puede mostrar si usted tiene mala alineación en la mordida.
  • Palpar la articulación y los músculos en busca de sensibilidad.
  • Presionar alrededor de la cabeza para localizar áreas sensibles o con dolor.
  • Deslizar los dientes de un lado a otro.
  • Observar, sentir y escuchar al abrir y cerrar la mandíbula.
  • Radiografías o resonancia magnética de la mandíbula.
Algunas veces, los resultados del examen físico pueden aparecer normales.
El médico también necesitará tener en cuenta otras afecciones, tales como infecciones, problemas relacionados con los nervios, infecciones del oído y dolores de cabeza, como la causa de sus síntomas.

Tratamiento

Las terapias simples y suaves generalmente se recomiendan primero.
  • Aprenda cómo estirar, relajar o masajear suavemente los músculos alrededor de su mandíbula. El médico, el odontólogo o fisioterapeuta le pueden ayudar.
  • Evite acciones que le causen síntomas, tales como bostezar, cantar y masticar chicle.
  • Pruebe con compresas húmedas, frías o calientes en la cara.
  • Aprenda técnicas para reducir el estrés.
  • Hacer ejercicio varias veces cada semana puede ayudarle a aumentar su capacidad para manejar el dolor.
  • Lea lo más que pueda, dado que las opiniones varían ampliamente sobre la forma de tratar los trastornos de la ATM. Busque opiniones de varios médicos. La buena noticia es que la mayoría de las personas finalmente encuentran algo que les ayude.
Pregúntele al médico o al odontólogo por medicamentos que usted pueda usar:
  • El uso a corto plazo de paracetamol (Tylenol) o ibuprofeno (Advil, Motrin), naproxeno (Aleve, Naprosyn), u otros medicamentos antinflamatorios no esteroides
  • Relajantes musculares o antidepresivos
  • En muy pocas ocasiones, inyecciones de corticoesteroides en la ATM para tratar la inflamación

 http://www.youtube.com/watch?v=CB7JvSu9v_s

http://www.youtube.com/watch?v=VgNZ46IPnmI


Introducción:
La ATM es la articulación que hace posible abrir y cerrar la boca. Y dónde la mandíbula se articula con el hueso temporal del cráneo, delante del oído y en cada lado de la cabeza. Se utiliza al masticar, hablar, tragar, bostezar, en diversas gesticulaciones faciales, etc. Por ello, es una de las articulaciones más usadas en el cuerpo. La ATM se puede localizar fácilmente poniendo los dedos delante de cada oído y presionando firmemente al abrir y cerrar la boca: el movimiento que sentirá ocurre en cada ATM. Trabajan siempre juntas y conducidas por cuatro pares de músculos que crean sus movimientos. Cuando las ATM funcionan correctamente, se puede abrir y cerrar su boca sin dolor ni molestias. Cuando hay alguna clase de dolor, es porque alguna de sus partes (muscular, ósea o nerviosa) ha perdido o disminuido alguna de sus funciones producto de alguna disfunción y por tanto ésta se extiende a la ATM misma al ser parte de ésta, como usualmente se asigna la categoría clínica de esta enfermedad.
II.
Desarrollo embrionario de la ATM:
Las estructuras primarias que constituyen el complejo articular quedan establecidas aproximadamente a las 14 semanas de vida prenatal. A partir de este momento, los cambios morfológicos se suceden gradualmente con el crecimiento y conducen al aumento de tamaño de las estructuras articulares.
De tal modo que al estudio de esta pieza articular en embriones humanos precoces (antes de la séptima semana de vida intrauterina), cuando la mandíbula no contacta aún con la base del cráneo, se desarrolla una articulación transitoria entre huesos que se forman en el extremo posterior del cartílago de Meckel, con la base del cráneo.
Este es, podemos afirmar, el proceso embriológico precedente a la compleja formación de la articulación temporomandibular y cualquier alteración de su desarrollo determina una disfunción que traerá consigo malestar consistente en dolor nervioso, muscular (sistema auditivo), dificultades masticatorias, complicaciones musculares, etc.
Durante el período sucede la diferenciación del ATM, donde el extremo posterior del cartílago de Meckel se osifica, convirtiéndose en martillo y yunque, de modo tal, que esta primitiva articulación pierde su relación con la mandíbula y se incorpora al oído medio, desplazándose hacia la parte superior de la mandíbula e integrándose a su nueva función de la que originalmente se inicia.
Así, llega la sexta a octava semana de vida fetal, aparece el primer esbozo de la formación de la mandíbula. Esta ocurre por diferenciación del primer arco branquial o visceral. Este arco se convierte en 2 barras cartilaginosas que se sitúan en el margen superior y en el margen inferior (cartílago de Meckel), dando formación a la mandíbula primitiva.
Las extremidades posteriores de ambos cartílagos se unen para formar una articulación que a menudo se conecta con el cráneo y que suspende la mandíbula. A esta articulación se le llama articulación cuadrado articular primitiva o meckeliana y su particularidad radica en que puede accionar externa o internamente proporcionan una margen de seguridad funcional muy alto con respecto a muchas de las disfunciones que puede presentar.
Esta fortaleza fisiológica se debe a que la ATM tiene un origen embriológico excepcional, originado desde dos blastemas: condilar y glenoideo. Entre estos 2 blastemas aparece una densa capa de tejido mesodérmico que va a constituir el futuro disco articular. Así, el proceso que se inicia en la séptima semana de vida intrauterina, culmina a las 21 semanas, donde se encuentra completamente formada.
En estudios previos, realizados en fetos de 16 semanas de gestación, se identificaron los componentes tisulares del CATM en vías de maduración. Desde el punto de vista inmunohistoquímico, los tejidos articulares y los músculos asociados aún eran inmaduros. Sin embargo, el cóndilo mandibular de esta edad, mostró las cuatro zonas histológicas descriptas para el recién nacido.
A los 4 meses del desarrollo intrauterino, el esbozo del disco articular está constituido por tejido mesenquimático condensado, ubicándose entre los compartimentos supra e infradiscal, distinguiéndose muy bien de los otros tejidos. En el recién nacido, el disco articular es aplanado y casi circular.
III.
Aspectos Histológicos:
Para poder identificar la naturaleza misma de la disfunción de la ATM es necesario diferenciar ésta de otros seres vivos que al igual que el hombre presentan esta región y función basada en una curiosa articulación simétrica externa e internamente y que opera con un sistema sinovial, y puede ser considerada como la más notablemente compleja de todas las demás articulaciones de nuestro organismo. Se integra por el cóndilo mandibular, la eminencia articular y fosa articular (cavidad glenoidea) del temporal, el disco articular, que es un disco movible especializado en la acción masticatoria de las piezas articulares, la membrana sinovial, que caracteriza la forma de trabajo articular, y la cápsula articular, que protege toda esta intrincada estructura osteomuscular articular.
El cóndilo mandibular es una eminencia ovoidea cuyo eje mayor está dirigido atrás y adentro, unidas a la rama mandibular mediante el cuello más estrecho, que es más fino en su parte anterointerna, donde se inserta el músculo pterigoideo externo. Sólo la parte anterior hasta la cresta condilar está tapizada por fibrocartílago.
La cavidad glenoidea es una depresión profunda de forma elipsoidal cuyo eje mayor se dirige atrás y adentro, y forma parte del hueso temporal. Está limitada anteriormente por la eminencia articular (raíz transversa de la apófisis cigomática), y posteriormente por la cresta petrosa y apófisis vaginal; por fuera limita con la raíz longitudinal de la apófisis cigomática y por dentro con la espina del esfenoides. Está dividida en dos partes por la cisura de Glaser, siendo solo la anterior articular y está recubierta de tejido fibroso.
Una importante característica embriológica es que a las 40 semanas la cavidad glenoidea es plana; y es la erupción dentaria la que va configurando su concavidad, la misma que continua su proceso de formación hasta aproximadamente el primer tercio de la vida del hombre. Recién la aparición de la muela del juicio culmina los últimos “toques” al desarrollo final de la cavidad glenoidea. Inclusive se ha observado que la ATM recién adquiere su forma más o menos concluyente cuando el tubérculo articular adquiere su completo desarrollo lo cual ocurre en la etapa prepuberal (esto es entre los 11 y 14 años), en que teniendo ya su forma bastante definida, continuará creciendo hasta completar su tamaño final hacia los 25 años de vida.

 http://www.osteoplac.com/productos/referencias_atm.pdf






 http://search.babylon.com/?q=ARTICULACION+TEMPOROMANDIBULAR&babsrc=NT_FFUP&s=video&rlz=0&as=0&ac=0%2C276%2C276%2C276

TEJIDOS BLANDOS




  • Introducción
  • El aparato estomatognático es el conjunto de los elementos que forman parte de la boca, cuyas funciones son la masticación y deglución, la fonación, la respiración y el sentido del gusto.
    El aparato estomatognático está formado por el aparato masticatorio, este aparato está constituido por la dentición, los maxilares-donde se implantan los dientes-, la articulación temporomandibular, los músculos de apertura y cierre, lengua, labios, mejillas y terminaciones nerviosas y vasculares.
    La boca es el segmento inicial del tubo digestivo en la que radica el sentido del gusto y tiene un papel importante en los procesos de fonación y articulación de los sonidos. Está formada por un esqueleto óseo recubierto por un tejido blando que conforma la cavidad bucal.
    La cavidad bucal está situada en la cara, por debajo de las fosas nasales, y está dividida por los arcos que forman los dientes o arcos dentarios en dos porciones (encías):
    -una anterior, llamada vestíbulo bucal.
    -otra posterior que es la boca propiamente dicha.
    • Esqueleto blando de la cavidad bucal
    El tejido blando que conforma la boca permite que se puedan diferenciar unas paredes que la determinan y las glándulas salivares. Estas paredes bucales o límites de la cavidad bucal son las siguientes:


    1. pared anterior: formada por los labios, son dos repliegues
    músculo membranosos, uno superior y otro inferior, adaptados
    a la convexidad de los arcos dentarios. En los labios se insertan
    gran cantidad de músculos faciales responsables de la
    mímica: buccinador, risorio, etc.
    2. pared posterior: formada por el velo del paladar y el istmo
    de las fauces, en su parte central, es visible la úvula o campanilla
    y a los lados las amígdalas palatinas.
    3. pared superior: está formada por el paladar duro y el paladar blando:
    3.1. paladar duro: formado por la bóveda palatina, es cóncavo
    y está limitado por los arcos dentarios del maxilar superior, está
    recubierto de una mucosa fibrosa y resistente

  • paladar blando: no tiene soporte óseo y está formado por el velo del paladar.
  • Pared inferior: está formada por la lengua y el suelo de la boca.
  • La lengua es un órgano fibro-musculoso que interviene en múltiples funciones con son la masticación, el sentido del gusto, la fonación y la deglución. En su cara inferior destaca la presencia de un frenillo y de unas venas muy marcadas llamadas raninas. Sus caras laterales están en contacto directo con los alvéolos dentarios y es un lugar donde frecuentemente suelen aparecer algunos tipos de cáncer. En su cara superior, se encuentran las papilas gustativas, encargadas de recoger el sabor de los alimentos:


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     http://scielo.isciii.es/pdf/odonto/v26n1/original1.pdf


    Sobre la boca y los dientes

    Probablemente, lo primero que se te ocurre cuando piensas en la boca es comer ¡o besar! Pero tu boca hace mucho más que ser la entrada de la comida o besuquear a tu amorcito.

    ¿Qué sería de nosotros sin ellos?

    La boca y los dientes forman tu sonrisa, que a menudo es lo primero que percibe la gente cuando te mira. Además, la boca es fundamental para hablar: la lengua (que también nos permite saborear los alimentos) nos permite formar las palabras con la ayuda de los labios y los dientes. La lengua fricciona o golpea los dientes para producir ciertos sonidos; el sonido z, por ejemplo, se produce cuando la lengua roza la hilera superior de dientes. Si una persona cecea, significa que su lengua toca los dientes en vez de apoyarse directamente tras ellos al pronunciar palabras con el sonido s.
    Sin los dientes, sólo podríamos seguir una dieta líquida o de alimentos blandos o triturados. Las partes más duras del cuerpo, los dientes, son necesarias para la masticación, el proceso por el cual desgarramos, cortamos y molemos los alimentos preparándolos para la deglución. La masticación permite que las enzimas y lubricantes que se segregan en la boca faciliten la digestión, o descomposición de los alimentos. Esto convierte a la boca en uno de los primeros pasos en el proceso digestivo. Sigue leyendo para descubrir de qué manera cada aspecto de la boca y de los dientes desempeña un papel importante en nuestra vida cotidiana.

    Anatomía básica de la boca y de los dientes


    El interior de la boca está cubierto de mucosas. Del mismo modo que la piel recubre y protege el exterior del cuerpo, las mucosas recubren y protegen su interior. Las mucosas producen moco, lo que las mantiene húmedas.
    La parte superior de la boca, cubierta por una membrana, se conoce como paladar. La parte delantera consiste en una porción ósea denominada paladar duro y la parte posterior carnosa se conoce como paladar blando. El paladar duro separa la boca de la nariz, que está ubicada justo encima. El paladar blando forma una especie de cortina entre la boca y la garganta (o faringe) en la parte posterior de la boca. El paladar blando contiene la úvula, la parte carnosa que cuelga en el fondo de la boca. Las amígdalas están ubicadas a ambos lado de la úvula y parecen pilares gemelos que sostienen la abertura de la faringe.
    Un haz de músculos se extiende desde la base de la boca para formar la lengua. La superficie superior de la lengua está cubierta de diminutas protuberancias denominadas papilas, que nos permiten captar los sabores. En la lengua, hay cuatro tipos de papilas gustativas: las que pueden detectar los sabores dulces, salados, agrios y amargos.
    Tres pares de glándulas salivales, ubicadas en las paredes y la base de la boca, segregan saliva, que contiene una enzima digestiva denominada amilasa, encargada de iniciar la descomposición de los hidratos de carbono incluso antes que los alimentos entren en el estómago.
    Los labios están cubiertos de piel por la parte exterior y de mucosas resbaladizas en el interior de la boca. El principal músculo del labio, denominado orbicular, permite mover libremente los labios. La coloración rojiza de los labios proviene de los vasos sanguíneos subyacentes y por este motivo los labios sangran tan fácilmente cuando se lesionan. La parte interna de los labios está conectada a las encías.